Hola a todas/os. Como la semana pasada realicé la receta de los canelones de atún en esta ocasión os traigo la lasaña para rematar dos recetas de pasta clásicas. La receta es muy sencilla y no es exactamente la típica salsa boloñesa pero casi. Un saludo.

INGREDIENTES: (para 4 persona)

- 12 tiras de pasta para lasaña
- 1/2 kilo de carne picada
- 1/2 pimiento verde
- 4 tiras de bacon ahumado
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 diente de ajo
- tomate frito
- bechamel
- mozzarella
- mantequilla
- salsa perrins
- 1/2 vaso de vino blanco
- sal y pimienta negra
- 1 cayena
- tabasco
- aceite

ELABORACIÓN:

- Para comenzar, troceamos la cebolla, el pimiento verde, la zanahoria y el ajo. Calentamos el fuego y echamos el aceite necesario en una sartén grande para pochar los ingredientes. Mientras se van calentando en otra sartén iremos friendo la carne picada y el bacon cortado en trocitos. Sazonamos y dejamos que se vaya rehogando. Una vez esté lista la cebolla, el pimiento, la zanahoria y el ajo, añadiremos el medio vaso de vino blanco y lo dejamos reducir.

- A continuación añadimos el tomate, la cayena, unas gotas de salsa perrins y tabasco y lo salpimentamos. Dejamos que se haga durante un poco y añadimos la carne picada y el bacon que teníamos en la otra sartén. Esto lo dejaremos hacerse a fuego bajo para que los sabores se combinen durante una hora y media.

- Una vez esté listo procedemos a la colocación de la lasaña. Calentamos el horno a 180º mientras vamos montando las capas en el recipiente. En un recipiente mediano previamente huntado de mantequilla, iremos colocando las tiras de pasta para lasaña, la mezcla de la carne con tomate y bechamel, así hasta que cubramos toda la altura del recipiente y en la última capa añadiremos la mozzarella.

- Esperar unos treinta minutos y ya la tendréis lista. Siempre comprobando que la parte de arriba este dorada. Emplatar y a comer se ha dicho. Buen provecho!

Llevaba ya un tiempecillo sin subir recetas pero ya vuelvo a la carga de nuevo con recetillas nuevas que he preparado,en este caso se tratan de unos fusilli, son como las helices que venden en los supermercados pero el doble de grandes.

Si os gusta la pasta, el curry y disponéis de 25 minutos para preparar esta receta os lo recomiendo porque su sabor sorprende y acompañándolo de las gambas le da un toque especial.

INGREDIENTES: (para 2 personas):

200g de fusilloni
100g de gambas
1 cebolla
1/2 pimiento verde
1/2 pimiento rojo
20ml de nata para cocinar
2 ajos
1 chorrito de tomate frito
1 cucharada pequeña de curry
1 hoja de laurel
agua
aceite
sal
azúcar
semillas de sésamo
perejíl

ELABORACIÓN:

- Ponemos a cocer la pasta durante unos 10 o 12 minutos en 1 litro de agua con un poco de sal y una hoja de laurel.

- Mientras, troceamos muy fina la cebolla y en trozos un poco más grandes los pimientos. Ponemos un chorrito de aceite en la sartén, echamos la cebolla y cuando empiece a pocharse añadimos los pimientos y dejamos friendo durante 5 minutos más.

- En otra sartén ponemos a freir los ajos cortados en láminas y cuando empiecen a dorarse añadimos las gambas, dejamos friendo durante unos 3 minutos más, retiramos en un plato.

- Cuando la verdura esté pochada, añadimos la nata, el curry, el chorrito de tomate frito, sal y una pizca de azúcar, removemos y dejamoscocinarlo durante 3 o 4 minutos hasta que la salsa espese.

- Cuando la pasta esté lista, la escurrimos y sin lavarla añadimos un chorro de aceite por toda ella y la ponemos en la sartén con la salsa. Mezclamos bien durante un minuto más y ya estaría listo.

- Para emplatar ponemos un poco de pasta en el plato y añadimos por encima las gambas. Damos un toque de color con perejíl picado y las semillas de sésamo.

* El truco del aceite en la pasta recien escurrida, es para que así la salsa se adhiera mejor.

Hoy he querido hacer unas cositas muy fáciles y baratitas, ademas la combinación de ambas es genial, con lo que ha sobrado de una me preparado un cuenquito con un huevo, sería una forma de preparar un plato grande.

INGREDIENTES: (PARA 1 PERSONA)

Para la ensalada:

2 o 3 cucharadas de remolacha en conservas
Queso feta
Perejíl
Pimienta negra
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre balsámico
Sal

Para la tapa:

1 patata vieja
1 trozo de chorizo picante
Romero
Tomillo
2 ajos
Huevos de codorniz
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

ELABORACIÓN:

Para la ensalada:

- En un bol ponemos las cucharadas de remolacha, cuatro vueltas a molinillo de la pimienta negra, un chorro generoso de vinagre balsámico, una cucharada de aceite de oliva, sal y el perejíl, removemos todo.
- Lo disponemos en el plato un montoncito de la preparación, desmenuzamos un trozo de queso feta por encima y disponemos también varios cubitos de queso alrededor.

Para la tapa:

- Cortamos las patatas viejas en dados de un centímetro, lavamos bien para eliminar la fécula y evitar así que se peguen al freírlas.
- Añadimos las tres cucharadas de aceite, a simple vista parecerá poco para las patatas pero sera suficiente y quedaran crujiente por fuera y blanditas por dentro. Cuando este bien caliente añadimos las patatas, tienen que chisporrotear, es la manera de darnos cuenta de que se están friendo y no cociendo, dejamos durante 7 u 8 minutos, junto a estas ponemos los ajos, el tomillo y el romero.
- Cortamos el chorizo en dados y añadiremos cuando las patatas estén doradas por fuera, freiremos el chorizo.
- Para emplatar dispondremos los cubos formando otro cubo mas grande y decoraremos con una ramita de romero.

* Las patatas viejas vienen muy bien para freír por que al contener menos agua quedaran mucho mas doraditas.

Buenos días, en esta ocasión os presento una receta muy rica, fácil y sana. Salmón con una salsa de pimientos de piquillo acompañado por un poco de cebolla caramelizada que siempre le da el toque y nunca decepciona.

INGREDIENTES: (para dos personas)

2 filetes de salmón fresco
1 lata de pimiento de piquillo
1 cebolla y media
1 diente de ajo
sal
aceite
pimienta negra
nata líquida
2 cucharadas de azúcar
vinagre

ELABORACIÓN:

- Para la salsa comenzaremos cortando la cebolla en juliana, calentando una sartén con aceite y dejando que se poche. Añadir una pizca de sal para que la cebolla llore. Cuando la cebolla esté lista, añadimos el diente de ajo picadito y los piquillos (sin jugo). Mantener en el fuego durante unos minutos para después triturarlo todo en la batidora. Para que la salsa obtenga el punto deseado añadiremos nata líquida para cocina, y lo iremos vertiendo en la batidora poco a poco. El resultado debe ser una crema entre espesa y cremosa, de un color que puede ir desde el rojo al naranja.

- Para hacer la cebolla caramelizada. Una vez pochada y lista la cebolla, añadiremos azúcar y un chorro de vinagre. Mantendremos el contenido durante el tiempo necesario hasta ver como la cebolla obtiene el color del caramelo.

- Una vez todo listo y para tener en el plato el salmón lo más fresco y jugoso posible, emplataremos con la salsa al inicio y salpimentando el salmón lo cocinaremos a fuego fuerte en una sartén con una gota de aceite. Como no queremos estropear el salmón darle dos fuertes golpes por ambos lados y sacadlo, ya que lo que buscamos es mantenerlo fresco, jugoso y rosado.

- Finalmente, colocarlo sobre la sala, decorar con la cebolla caramelizada y espolvorear pimienta negra molida por encima. Buen provecho!

Hoy os traigo una de las recetas que más ilusión me hacía presentaros, unos buenos judiones de la Granja(Segovia), que pese a que son recetas que con estos calores se hacen espesitas.. vendrá bien tenerla para cuando empiece la temporada de cuchara

Aprovecho para deciros que son las fiestas de La Granja y el martes se hará la tradicional judiada, por si estáis cerca y os apetece degustar este plato.

INGREDIENTES: (para 4 personas)

300g de judiones
50g de chorizo
50g de morcilla
1/2 oreja de cerdo
1 pie de cerdo
100g de jamón serrano
1 cebolla
1 ajo
1 cucharada de harina
1 pimiento morrón asado
1 tomate
1/2 taza de aceite
perejíl
laurel
pimentón

ELABORACIÓN:

- Lo primero dejaremos los judiones en remojo durante toda la noche en agua fría sin añadir sal.

- Pondremos a cocer en una olla, la oreja, el pie de cerdo, el jamón serrano(en taquitos) y el chorizo cortado en trozos junto a los judiones, que se vayan haciendo lentamente durante 1 hora más o menos.

- Preparamos en una sartén con aceite el sofrito con la cebolla bien picada, el pimiento morrón, el ajo y el perejíl, también picados muy finos. Tras 5 minutos cuando veamos que empieza a tomar color añadimos el laurel y la harina, dejamos que se dore sin parar de remover, así evitaremos que se hagan grumos.

- Después mezclaremos el pimentón con el tomate pelado y cortado en trozos pequeños, corregimos de sal y vertemos sobre las judias.

- Por último cuando veamos que ya están las judias añadiremos la morcilla, con el fuego al mínimo durante 15 minutos más para que se haga.

- Ya tendríamos esta deliciosa receta que para todos los que somos de cuchara nos encanta. Buen provecho!

* Tras la primera hora de cocción podéis retirar la grasa que veáis conveniente, puesto que el chorizo al cocer suelta bastante.

* La morcilla es opcional, a mi me encanta el sabor que dá, si vais a añadirla, que sea una morcilla entera para evitar que se rompa y se mezcle con el caldo, por eso hay que ponerlo al mínimo y nunca taparlo.

  * La próxima receta segoviana… “Sopa castellana”.

Que ganas tenía de empezar a hacer las recetas de mi ciudad, Segovia, la cual os invito a conocer desde aquí.
Empezaremos por estos champiñones y seguiremos por unos judiones de La Granja que en breve subiré y que seguro os gustarán.

A partir de ahora, intentaré hacer las recetas más conocidas de las diferentes ciudades e ir conociendo lo mejor de cada ciudad de España
Sin más, os recomiendo esta receta por su sencillez y por lo buena que sabe.

INGREDIENTES: (para 2 personas)

12 champiñones medianos
3 lonchas de panceta
1 vaso de vino blanco
2 huevos
2 ajos
perejíl picado
orégano
aceite
sal

ELABORACIÓN:

- Lavamos los champiñones y les cortamos el tronco.

- Cortamos en tiras la panceta y ponemos a freir en una sartén con un chorrito de aceite, hasta que veamos que empieza a dorarse.

- Ahora añadimos los champiñones y les dejamos friéndo durante unos 5 minutos.

- Mientras, cortamos los ajos en láminas y les incorporamos a la sartén. Lo dejaremos friendo hasta que se evapore el agua que sueltan los champiñones.

- Añadimos el vaso de vino blanco, la cucharada de orégano, un poco de perejíl fresco y sazonamos al gusto. Dejamos que se vaya cociendo poco a poco hasta que se haya evaporado casi todo el vino.

- Batimos los huevos y les añadimos a la sartén, removemos poco a poco y cuando veamos que se han cuajado los retiramos.

- Ya tan sólo queda emplatar acompañando los champiñones con unas rebanadas de pan tostado. A comer!.

* Cuando echéis los huevos batidos, tened cuidado de que no cuajen demasiado ya que sinó no quedará tan jugoso el revuelto.

* Esta es la primera de muchas recetas que haremos de Segovia, para que vayáis conociendo la gastronomía de nuestra ciudad.

Esta semana va a haber un gran cambio en “Ole tus fogones”, estaros atentos porque durante estos días se anunciará, tambíen os comento que ya hemos llegado a las 50 recetas por lo que estamos trabajando para terminar el libro que estará listo ya en muy poco tiempo.

Tras haber hecho las albóndigas a la vainilla y no conseguir que tuvieran el sabor que buscaba.. me quedé con la espina clavada de que tenía que volver a hacer albóndigas, pero esta vez con una receta que sin ser arriesgada sabía que me iba a gustar. Hice una salsa barbacoa casera pero que fuese mas suave y aquí tenéis el resultado.

Por la red hay muchas recetas de albóndigas así que abro el debate, ¿cúal es para tí la mejor receta?

INGREDIENTES: (para 2 personas)

Para las albóndigas:

400g de carne de ternera picada
30g de miga de pan
1 huevo
un poco de leche
perejíl
harina
100g de champiñones
2 patatas

Para la salsa barbacoa:

6 tomates maduros
1 cebolla
1 ajo
1/2 pimiento rojo
2 cucharadas de vinagre
1 cucharada de maizena
1 cucharada de miel
2 cayenas
1 hoja de laurel
sal
aceite

ELABORACIÓN:

- Pelamos y troceamos la cebolla, el 1/2 pimiento rojo y el ajo, añadimos un chorrito de aceite a la cazuela y lo dejamos friendo durante 5 minutos.

- Troceamos los tomates y los añadimos a la cazuela, después añadiremos la maizena, la miel, las dos cayenas, la hoja de laurel y las 2 cucharadas de vinagre. Dejaremos que se vaya haciendo a fuego lento durante unos 25-30 minutos, iremos añadiendo sal al gusto.

- Para la carne esta vez usé sólo carne de ternera, para prepararla cogemos un bol, añadimos un chorrito de leche y mezclamos con la miga de pan. Echamos la carne en el bol junto al perejíl picado y un huevo, sazonamos y mezclamos bien todo.

- Prepararemos un plato con harina, y vamos haciendo las albóndigas, las pasamos por la harina y las reservamos. Una vez tengamos todas las albóndigas hechas, preparamos una sartén con abundante aceite y las fréimos. Os recomiendo que según se vayan retirando, las pongáis en un plato con papel de cocina para que absorva el aceite restante.

- Pasados los 30 minutos, añadimos las albóndigas a la cazuela de la salsa y dejamos que vaya cociendo durante 10 minutos más.

- En otra sartén freimos los champiñones y cuando empiecen a dorarse los añadimos a la salsa.

- Sólo quedaría freir las patatas en forma de dados y servir. Espero que os guste.

* Todo aquel que tenga problemas con el pan no le recomiendo esta receta, pues con esta salsa mojará al menos media barra de pan

* A partir de las siguientes recetas usaré la cámara de David, ya que ultimamente el iphone no enfoca todo lo que me gustaría y no quedan las fotos como quiero, tampoco se puede pedir más de la cámara de un teléfono

No hay nada como los clásicos. Un buen sabor del mar con esta receta gallega que no puede faltar.

INGREDIENTES: (para 2 personas)

1kg de almejas frescas
1 cebolla
1 diente de ajo
1/2 guindilla
2 cucharadas de salsa de tomate
1 cucharada de harina
1 cucharada de pimentón dulce
perejil picado
1 hoja de laurel
1/2 vaso de vino blanco
aceite
agua
sal

ELABORACIÓN:

- Para comenzar este plato, en primer lugar debemos preparar las almejas. Lo más importante para esto, es limpiarlas bien, para eliminar toda o la mayor cantidad de arena que puedan tener, ya que si no lo hacemos bien, estropeará nuestro plato. Yo las compré a las 5 de la tarde y las tuve en agua hasta la hora de cenar, tan solo colocar las almejas vivas en una cazuela y cubrirlas con agua y un poco de sal. Procurar que el agua esté bien fría. Y dependiendo del tiempo que las dejéis, 3 horas mínimo, tendréis que cambiar el agua unas 2 veces.
- Una vez listas, las removemos un poco para que queden bien limpias, retirar el agua y las impurezas que puedan conservar y las vamos a hervir. Para ello contamos con 1/2 vaso de agua y al empezar a hervir incluiremos la hoja de laurel y las almejas. Mantened en el fuego durante 3 o 4 minutos y siempre tapadas.
Las retiramos cuando estén listas y colamos el agua que nos ha quedado para enriquecer la salsa.
- Para la salsa, pelamos y troceamos el ajo y la cebolla en daditos pequeños para que no se aprecien en la salsa al finalizarla.
- Con la misma cazuela usada para hervir las almejas echamos un poco de aceite de oliva y dejamos pochar la cebolla y el ajo con la guindilla. Cuando se dore, añadir el pimentón dulce (cedido por mi maravillosa madre) y lo cocinamos bien sin quemarlo.
- Cuando esté bien cocinada la masa pastosa que nos quedará, le damos más cuerpo con la cucharada de harina y tras unos minutos removiendo y cocinándola, añadimos el vino blanco (Albariño D.O. Rías Baixas) Leí que usar un buen vino ayuda mucho, por lo que dicho y hecho.
- Y con esto ya casi está lista, dejamos que se evapore el alcohol y le añadimos el agua de las almejas y el tomate frito, a poder ser casero. Juanjo ya nos recomendó preparar una buena cantidad de tomate casero para este tipo de casos.
- Dejad que se cocine todo durante 10 minutos y añadimos las almejas, lo removemos con cariño y al plato.

Cortamos un buen trozo de pan, acompañamos con una copita del vino blanco y a saborear, pringar y disfrutar. Buen provecho!

* Yo conservé las almejas hervidas con un poco del propio líquido que soltaron para que no se secaran mientras preparaba la salsa.
** Mi madre me aconsejó que tuviera cuidado con el pimentón y que dejara que se cocinara bien, por lo que os lo repito a vosotros.